Miriam Quesada Chavarría periodicoenlacecr@gmail.com

Costa Rica, este pedacito de continente donde nacimos, lleva su nombre muy bien puesto: según algunos historiadores, Cristóbal Colón nombró nuestro país así porque los aborígenes que lo recibieron cargaban joyas de oro, metal considerado de gran valor durante los siglos XVIXVII y la primera mitad del siglo XVIII en Europa. Sin embargo, hoy sabemos que como ahora, en aquel entonces éramos un puente entre las culturas que habitaban los continentes sur y norte. Esa oportunidad intercambio cultural y social  marcó la idiosincrasia del costarricense. 

Podemos creer que ser de una religión u otra es un derecho y que podemos manifestar y respaldar con acciones;  la democracia también necesita ser respaldadas por acciones.  Algún expresidente que ganó las elecciones en este país, expresó en una ocasión que si un político lograba el apoyo del mundo religioso en general, sin duda sería el ganador indiscutible de las elecciones.  Su estrategia fue colocar a un líder religioso importante en su gobierno y efectivamente ganó las elecciones.

Costa Rica es considerada como un ejemplo de democracia a nivel mundial, otra vez impresionamos con nuestra forma de vida, nuestro derecho a decir lo que pensamos, a escoger a los que nos representan y a participar activamente en la política del país.

Sin embargo, los resultados de las recién pasadas elecciones municipales muestran un panorama de desinterés, de falta de compromiso y de responsabilidad con la democracia que nos define políticamente  a nivel mundial.

Según datos del Tribunal Electoral, a excepción de la alcaldía de Corredores, en todos los cantones de la Región Brunca, el abstencionismo fue el gran ganador en los resultados de las elecciones municipales.

El Cantón de Corredores tuvo un comportamiento donde el abstencionismo y el porcentaje de personas que apoyó el alcalde electo fue casi el mismo.  Los datos mostraron un abstencionismo del 64,79%,  y las personas que votaron por el alcalde reelecto, Carlos Hugo Viales Fallas fue de 65,51%. En este cantón, los votantes pudieron elegir entre ocho propuestas.

El líder cantonal que siguió en mostrar mejores resultados fue el señor José Bernardino Rojas Méndez, alcalde re-electo en Buenos Aires,  quien alcanzó un 55,7% de los votos emitidos, contra un 62,39% de abstencionismo. Un total de seis propuestas se hicieron para optar por el puesto de alcaldía en este cantón.

El cantón de Coto Brus, eligió nuevo alcalde. El señor Steven Alberto Barrantes Nuñez fue elegido por el 43,90% de las personas que votaron escogiendo entre cinco participantes en las papeletas para el puesto. Pero el abstencionismo lo superó por un 56,52%.

Golfito también estrena alcalde: el señor Freiner Willam Lara Blanco llega a ocupar la silla de la alcaldía, disputándolo entre ocho propuestas,  respaldado por el 26,67% de los votos registrados en las urnas electorales.  Mientras que el 64,01% de los habitantes de Golfito decidieron no cumplir con la responsabilidad que la democracia nos pide.

El 40,02% de la población de Osa volvió a confiar la principal silla en la administración del cantón a Jorge Alberto Cole de León, donde participaron siete partidos  para alcaldía.   El 55,40% de los votantes inscritos en el padrón electoral no se presentaron a ejercer su derecho.

En Pérez Zeledón se inscribieron ocho propuestas  para alcaldía y el pueblo  re- eligió a Jeffry Gilberto Montoya Rodríguez  como alcalde, con un porcentaje de votos de un 53,82%  contra un 62,59% de abstencionismo.

Como hemos visto, las personas de nuestra región pudieron haber ejercido su derecho al voto, porque tenían muchas propuestas de las cuales pudieron haberse informado y tomar decisiones. En todos los cantones se mostró un interés por participar en las elecciones: de cinco a ocho  fueron las propuestas para el puesto de alcalde presentes en las papeletas para elecciones, partidos tradicionales, partidos nuevos, nuevos rostros, y aún así el abstencionismo fue evidente.  Felicito a los alcaldes electos y confío que la transparencia y el bienestar se su cantón y su gente sea el norte que busquen en cada una de las decisiones que tomen; pero llamar la atención hacia el compromiso que como costarricenses tenemos de participar en  la vida democrática nacional, con el menor esfuerzo que se nos pide, ir a votar en las elecciones es mi objetivo.

Y es que esta realidad la viven todos procesos socio- políticos en Costa Rica:  fundaciones, asociaciones de desarrollo, comités, etc.  Ya no queremos involucrarnos en la toma de decisiones, y nos quejamos de las decisiones que otros toman porque nosotros cedimos el poder. Debemos retomar el camino de la democracia antes de que sea tarde.  La democracia nos permite estar presentes en los grandes cambios del país. Todos debemos interferir en la dirección que tome este barco que se llama Costa Rica. Involucrarse es nuestro deber.

Abstencionismo, cáncer silencioso que carcome el sistema democrático costarricense

20 febrero, 2020 8:04 pm

Miriam Quesada Chavarría periodicoenlacecr@gmail.com

Costa Rica, este pedacito de continente donde nacimos, lleva su nombre muy bien puesto: según algunos historiadores, Cristóbal Colón nombró nuestro país así porque los aborígenes que lo recibieron cargaban joyas de oro, metal considerado de gran valor durante los siglos XVIXVII y la primera mitad del siglo XVIII en Europa. Sin embargo, hoy sabemos que como ahora, en aquel entonces éramos un puente entre las culturas que habitaban los continentes sur y norte. Esa oportunidad intercambio cultural y social  marcó la idiosincrasia del costarricense. 

Podemos creer que ser de una religión u otra es un derecho y que podemos manifestar y respaldar con acciones;  la democracia también necesita ser respaldadas por acciones.  Algún expresidente que ganó las elecciones en este país, expresó en una ocasión que si un político lograba el apoyo del mundo religioso en general, sin duda sería el ganador indiscutible de las elecciones.  Su estrategia fue colocar a un líder religioso importante en su gobierno y efectivamente ganó las elecciones.

Costa Rica es considerada como un ejemplo de democracia a nivel mundial, otra vez impresionamos con nuestra forma de vida, nuestro derecho a decir lo que pensamos, a escoger a los que nos representan y a participar activamente en la política del país.

Sin embargo, los resultados de las recién pasadas elecciones municipales muestran un panorama de desinterés, de falta de compromiso y de responsabilidad con la democracia que nos define políticamente  a nivel mundial.

Según datos del Tribunal Electoral, a excepción de la alcaldía de Corredores, en todos los cantones de la Región Brunca, el abstencionismo fue el gran ganador en los resultados de las elecciones municipales.

El Cantón de Corredores tuvo un comportamiento donde el abstencionismo y el porcentaje de personas que apoyó el alcalde electo fue casi el mismo.  Los datos mostraron un abstencionismo del 64,79%,  y las personas que votaron por el alcalde reelecto, Carlos Hugo Viales Fallas fue de 65,51%. En este cantón, los votantes pudieron elegir entre ocho propuestas.

El líder cantonal que siguió en mostrar mejores resultados fue el señor José Bernardino Rojas Méndez, alcalde re-electo en Buenos Aires,  quien alcanzó un 55,7% de los votos emitidos, contra un 62,39% de abstencionismo. Un total de seis propuestas se hicieron para optar por el puesto de alcaldía en este cantón.

El cantón de Coto Brus, eligió nuevo alcalde. El señor Steven Alberto Barrantes Nuñez fue elegido por el 43,90% de las personas que votaron escogiendo entre cinco participantes en las papeletas para el puesto. Pero el abstencionismo lo superó por un 56,52%.

Golfito también estrena alcalde: el señor Freiner Willam Lara Blanco llega a ocupar la silla de la alcaldía, disputándolo entre ocho propuestas,  respaldado por el 26,67% de los votos registrados en las urnas electorales.  Mientras que el 64,01% de los habitantes de Golfito decidieron no cumplir con la responsabilidad que la democracia nos pide.

El 40,02% de la población de Osa volvió a confiar la principal silla en la administración del cantón a Jorge Alberto Cole de León, donde participaron siete partidos  para alcaldía.   El 55,40% de los votantes inscritos en el padrón electoral no se presentaron a ejercer su derecho.

En Pérez Zeledón se inscribieron ocho propuestas  para alcaldía y el pueblo  re- eligió a Jeffry Gilberto Montoya Rodríguez  como alcalde, con un porcentaje de votos de un 53,82%  contra un 62,59% de abstencionismo.

Como hemos visto, las personas de nuestra región pudieron haber ejercido su derecho al voto, porque tenían muchas propuestas de las cuales pudieron haberse informado y tomar decisiones. En todos los cantones se mostró un interés por participar en las elecciones: de cinco a ocho  fueron las propuestas para el puesto de alcalde presentes en las papeletas para elecciones, partidos tradicionales, partidos nuevos, nuevos rostros, y aún así el abstencionismo fue evidente.  Felicito a los alcaldes electos y confío que la transparencia y el bienestar se su cantón y su gente sea el norte que busquen en cada una de las decisiones que tomen; pero llamar la atención hacia el compromiso que como costarricenses tenemos de participar en  la vida democrática nacional, con el menor esfuerzo que se nos pide, ir a votar en las elecciones es mi objetivo.

Y es que esta realidad la viven todos procesos socio- políticos en Costa Rica:  fundaciones, asociaciones de desarrollo, comités, etc.  Ya no queremos involucrarnos en la toma de decisiones, y nos quejamos de las decisiones que otros toman porque nosotros cedimos el poder. Debemos retomar el camino de la democracia antes de que sea tarde.  La democracia nos permite estar presentes en los grandes cambios del país. Todos debemos interferir en la dirección que tome este barco que se llama Costa Rica. Involucrarse es nuestro deber.