Boruca frena construcción de atracadero en Parque Nacional Marino Ballena

En playa Piñuelas es donde se pretende construir el atracadero turístico.
Prensa Kioscos Ambientales/ Redacción
El 8 de setiembre de 2017, en el marco de la inauguración del noveno Festival de Ballenas y Delfines, el ICT entregó al INCOP- Instituto Costarricense de puertos del Pacífico, los planos del anteproyecto para construir un atracadero turístico en Playa Piñuelas. Con la construcción de este muelle se mejorarían las condiciones para el traslado de personas que visitan el Parque Marino Ballena y permitiría mayor visitación de turistas en la temporada de ballenas, facilitando el acceso de personas mayores y niños.

Caracol múrice, usado para teñir hilos de tejer.
La zona del atracadero es de importancia cultural para el pueblo indígena Boruca pues la usan ancestralmente para recreación y recolecciones de la tinta del caracol múrice, usada para teñir hilos de tejer y la extracción de quitash (sal). Estas prácticas fueron frenadas con la creación del Parque Nacional Marino Ballena (PNMB). Después de un largo proceso de reclamos en 2017 se firmó un acuerdo con el Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC) y el Ministerio de Ambiente y Energía (MINAE) que les permite continuar con sus costumbres en el área protegida.
Debido a que las fases previas de planificación del atracadero no fueron consultadas con Boruca; no existir una investigación científica que determine los impactos sobre el caracol Múrice y no haberse realizado un Estudio de Impacto Cultural hacia la población indígena de Boruca; cuestión obligatoria al ser una zona de uso ancestral de los indígenas, el Consejo Cultural y la Asociación de Desarrollo de Boruca, nombraron una comisión de ocho personas, dedicada exclusivamente a atender la situación.

Solo con el tinte del caracol múrice 100 mujeres elaboran arte con tejidos.
Entre sus acciones, la comisión convocó a las instituciones involucradas en la construcción del Atracadero, el Ministerio del Ambiente y Energía (MINAE), el Área de Conservación Osa y la administración del parque, para exponerles las razones de oposición al proyecto.
Gilbert González Maroto, miembro de la Comisión, señaló a Periódico Enlace:
“Nosotros solicitamos que se haga el debido proceso, que se consulte a la población indígena; y se respeten los derechos de los Bruncas. Las mujeres indígenas visitan la playa en época de verano, de enero a mayo, para extraer la tinta del caracol Múrice. Esta práctica ancestral sostenible está registrada desde 1630 cuando un sacerdote hace un escrito especificando el uso que se le da a este caracol por parte de los Bruncas. Desde antes que se formara Uvita, ya nuestros ancestros hacían un uso racional de los recursos que produce el área de la playa en plantas medicinales, en pesca, en recreo, en el uso de la tinta del caracol múrice. Solo con el tinte del caracol múrice 100 mujeres elaboran arte con tejidos, también el área protege muchas especies que son las que llaman al turismo nacional y extranjero y generan enormes cantidades de recursos económicos y socializan las ganancias, donde hay una diversidad de actores que obtienen algún tipo de beneficio o producto del parque”.
Al respecto, el INCOP ha tomado el siguiente acuerdo:
- “…solicitar el desarrollo del estudio biológico y cultural sobre el tema del caracol púrpura (múrice), y el impacto cultural que puede tener sobre la población brunca y el parque, el desarrollo de la construcción del atracadero”.
- “dejar pendiente el inicio de la construcción del atracadero, a la espera de los resultados de los estudios anteriormente señalados”.