OSA Y SUS ESFERAS PRECOLOMBINAS

Representante Indígenas Boruca junto a la Esfera más grande reportada en el país, se encuentra en el Sitio Arqueológico El Silencio
Por Uriel Rojas R.

Esferas “repatriadas”, se encuentran en el Sitio Arqueológico Finca 6
El cantón de Osa es reconocido a nivel mundial por su extraordinaria biodiversidad natural pero además por sus famosas esferas de piedras precolombinas.
Este importante ícono de la arqueología costarricense es un legado de las sociedades que habitaron esta extensa llanura aluvial de nuestro cantón, muchos años antes del período de Conquista.
Las esferas de piedra son artefactos muy singulares que, de acuerdo a postulados científicos fueron utilizadas principalmente como símbolos de rango, poder e identidad.
La mayoría de las esferas han sido encontradas en las aldeas principales de la zona y se destacan por su fino acabado y grandes tamaños. A lo interno de los asentamientos estos símbolos se ubican cercanas o sobre construcciones artificiales, montículos y plazas.
También se agrega una tercera opción en especial para los agrupamientos registrados (se trata de alineamientos rectos, curvos y triangulares) los cuales pudieron tener un significado astronómico y ritual, y estar asociados a los ciclos naturales y su relación con el ciclo agrícola u otras calendarizaciones de los grupos que las fabricaron, lo cual aún no se ha verificado por la remoción y alteración de que fueron objeto.
El sitio Finca 6 junto a Batambal, Grijalba 2 y El Silencio son algunos de los lugares en este cantón que poseen esferas de piedra.
Las dimensiones de las esferas oscilan en un rango de los 7 centímetros hasta los 2,57 metros de diámetro y su peso llega a superar las 16 toneladas. La mayoría están hechas en piedras duras como granodiorita, gabros y algunas pocas en arenisca y caliza. Su elaboración habría iniciado en los primeros siglos después de Cristo pero aún faltan fechamientos para precisar mejor este dato.
En el período tardío de ocupación, se fabricaron en mayor número y se han encontrado junto con cerámica y otros objetos que se ubican entre 800 y 1500 d.C.
Se conocen más de 40 sitios arqueológicos con esferas de piedra, desde el delta del Diquís en el sur, la Isla del Caño a 17 kilómetros de la costa, y los valles de Coto Brus y General.
Muchas de las esferas fueron removidas de sus lugares originales y trasladados a otros lugares dentro y fuera del país. En los últimos años se ha podido recupera un número importante de esferas y se ha iniciado un proceso de “repatriación” hacia comunidades del sur del país.