Redacción/Fecoopse R.L.

El Banco Central actualizó las expectativas económicas para los próximos 18 meses. En la entrega anterior, se analizaron las expectativas en cuanto a crecimiento económico y desempleo. Ahora, lo haremos en relación a las variables monetarias y crediticias.

Tasas de interés: actualmente las tasas se encuentran en niveles mínimos.

El Banco Central impulsó una reducción significativa de las tasas de corto plazo, lo cual se refleja en los niveles de la Tasa de Política Monetaria y en nivel de tasas del mercado.

Esto se ha visto complementado con la menor presión por liquidez de las entidades, ante un crédito desacelerado en los últimos meses.

Es posible que durante lo que resta del 2020 y el primer semestre del 2021, no se den presiones significativas en los niveles de tasas, como parte de los ajustes necesarios de la economía hacia una posible reactivación; de esta forma se podría estimar liquidez necesaria para que el Gobierno pueda buscar el financiamiento en el mercado interno sin presionar las tasas.

Paralelamente, es necesario el monitoreo a los préstamos que se están gestionando con organismos multilaterales y el acuerdo con el FMI, el cuál al concretarse, dará una mayor confianza para los meses próximos.

Tipo de cambio: en días recientes ha sido noticia el aumento en el tipo de cambio, dejando los niveles de cotización ligeramente superiores a los 600 colones por dólar. Estos movimientos han sido normales.

Actualmente, hay una menor entrada de dólares, tanto por las menores exportaciones como la menor entrada de turistas, pero también hay una menor salida, como resultado de la contracción de forma importante y sostenida de las importaciones.

Los movimientos del tipo de cambio no se consideran abruptos, corresponden también a un fenómeno esperado, donde en condiciones de incertidumbre y riesgo, el dólar es una moneda de refugio para los inversionistas.

El tipo de cambio en Costa Rica, muestra comportamientos cíclicos y estos movimientos son parte de esto.

El Banco Central ha estimado que para el mes de diciembre las Reservas Monetarias Internacionales llegarían a representar el 16% del Producto Interno Bruto, es decir, se estaría incrementando de forma importante la acumulación de dólares en el país.

Esto es información importante, pues implica que el Banco Central tiene reservas suficientes para, sin afectar la tendencia del tipo de cambio, intervenir para evitar lo que la entidad ha llamado desde hace varios meses, variaciones no controladas.

La inflación: el país no tiene presiones inflacionarias. Aunque mantiene la meta de inflación en 3%, considerando un +-1%, es posible que esté por debajo del rango meta.

La baja en la presión inflacionaria, ha cedido espacio al Banco Central, para tener una participación más activa en la economía, impulsando proyectos para buscar dar facilidades de financiamiento a las entidades financieras y que estas puedan canalizarlas en los sectores productivos.

En control supra indicado podría contribuir de manera activa, aunque con poca fuerza a reactivar la economía y el empleo, sin generar una presión inflacionaria importante y de alguna manera equilibrando los objetivos del Banco Central, dados en la Ley Orgánica de la autoridad monetaria.

Banco Central actualiza expectativas económicas: VARIABLES MONETARIAS

29 septiembre, 2020 5:50 pm

Redacción/Fecoopse R.L.

El Banco Central actualizó las expectativas económicas para los próximos 18 meses. En la entrega anterior, se analizaron las expectativas en cuanto a crecimiento económico y desempleo. Ahora, lo haremos en relación a las variables monetarias y crediticias.

Tasas de interés: actualmente las tasas se encuentran en niveles mínimos.

El Banco Central impulsó una reducción significativa de las tasas de corto plazo, lo cual se refleja en los niveles de la Tasa de Política Monetaria y en nivel de tasas del mercado.

Esto se ha visto complementado con la menor presión por liquidez de las entidades, ante un crédito desacelerado en los últimos meses.

Es posible que durante lo que resta del 2020 y el primer semestre del 2021, no se den presiones significativas en los niveles de tasas, como parte de los ajustes necesarios de la economía hacia una posible reactivación; de esta forma se podría estimar liquidez necesaria para que el Gobierno pueda buscar el financiamiento en el mercado interno sin presionar las tasas.

Paralelamente, es necesario el monitoreo a los préstamos que se están gestionando con organismos multilaterales y el acuerdo con el FMI, el cuál al concretarse, dará una mayor confianza para los meses próximos.

Tipo de cambio: en días recientes ha sido noticia el aumento en el tipo de cambio, dejando los niveles de cotización ligeramente superiores a los 600 colones por dólar. Estos movimientos han sido normales.

Actualmente, hay una menor entrada de dólares, tanto por las menores exportaciones como la menor entrada de turistas, pero también hay una menor salida, como resultado de la contracción de forma importante y sostenida de las importaciones.

Los movimientos del tipo de cambio no se consideran abruptos, corresponden también a un fenómeno esperado, donde en condiciones de incertidumbre y riesgo, el dólar es una moneda de refugio para los inversionistas.

El tipo de cambio en Costa Rica, muestra comportamientos cíclicos y estos movimientos son parte de esto.

El Banco Central ha estimado que para el mes de diciembre las Reservas Monetarias Internacionales llegarían a representar el 16% del Producto Interno Bruto, es decir, se estaría incrementando de forma importante la acumulación de dólares en el país.

Esto es información importante, pues implica que el Banco Central tiene reservas suficientes para, sin afectar la tendencia del tipo de cambio, intervenir para evitar lo que la entidad ha llamado desde hace varios meses, variaciones no controladas.

La inflación: el país no tiene presiones inflacionarias. Aunque mantiene la meta de inflación en 3%, considerando un +-1%, es posible que esté por debajo del rango meta.

La baja en la presión inflacionaria, ha cedido espacio al Banco Central, para tener una participación más activa en la economía, impulsando proyectos para buscar dar facilidades de financiamiento a las entidades financieras y que estas puedan canalizarlas en los sectores productivos.

En control supra indicado podría contribuir de manera activa, aunque con poca fuerza a reactivar la economía y el empleo, sin generar una presión inflacionaria importante y de alguna manera equilibrando los objetivos del Banco Central, dados en la Ley Orgánica de la autoridad monetaria.